DESCRIPCIÓN
Este vino nace 30 kilómetros al este del océano Pacífico, en el valle de Casablanca. Nuestros viñedos son influenciados por las suaves brisas del océano y la fría niebla matinal, lo que da como resultado un vino con vivos aromas de pera, membrillo y melón. Fresco y cremoso a la vez, este Chardonnay es perfecto para acompañar una ensalada griega, o unas machas a la parmesana al borde del mar.